Alrededor de 30 personas fueron asesinadas el lunes en un nuevo ataque ejecutado por personas armadas no identificadas contra una localidad situada en la provincia burkinesa de Komondjari, en el este del país africano, según fuentes de seguridad citadas por el portal burkinés de noticias Infowakat.
Estas fuentes han detallado que los asaltantes irrumpieron a primera hora del lunes en la aldea de Kodyel y mataron a 30 personas, además de herir a otras 20 e incendiar diversas viviendas y estructuras, en un aparente ataque en venganza por el reclutamiento de ‘voluntarios’ por parte de las autoridades en la zona.
El gobernador de la región Este, Saidou Sanou, ha confirmado la muerte de «más de una decena de civiles» y dos ‘voluntarios’ muertos en el ataque y ha resaltado que hay «muchos heridos» y daños materiales a causa de los incendios, tal y como ha recogido el portal de noticias Burkina24.
Sanou ha condenado con firmeza el ataque, cuya autoría no ha sido reclamada por el momento, y ha presentado sus condolencias a los familiares de las víctimas, al tiempo que ha pedido a la población que colabore con las fuerzas de seguridad.
El ataque ha sido perpetrado días después de la muerte de cerca de 20 personas en asaltos contra dos localidades en el norte de Burkina Faso, tras la captura y asesinato la semana pasada de los periodistas españoles David Beriáin y Roberto Fraile en el sureste del país africano.
Beriáin y Fraile fueron asesinados junto al ciudadano irlandés Rory Young tras un ataque perpetrado el pasado lunes contra una patrulla mixta contra la caza furtiva en el sureste del país, cerca de la frontera con Benín y Togo.
El aumento de las operaciones por parte de grupos yihadistas y el incremento de las tensiones intercomunitarias han complicado la situación de seguridad en Burkina Faso, especialmente desde la llegada al poder de Roch Marc Christian Kaboré en diciembre de 2015.
Ante esta situación, el primer ministro de Burkina Faso, Christophe Dabiré, abrió a principios de febrero la puerta a un posible proceso de diálogo con los terroristas. «No decimos que Burkina Faso esté en contra de las negociaciones con los terroristas», afirmó en un discurso ante el Parlamento.