Si, dicen que Balaguer creo esa «tradición»… evidentemente populista, burlona, avasalladora… poner a las personas a hacer fila para recibir un regalo… o a matarse en tumultos que sacan a la vista de todos lo peor del comportamiento humano y la degradación social que se vive a lo interno de la sociedad.
Llegaron los tiempos de las fotos. Durante todo el año los candidatos van desde la ridiculez de entregar canastillas, recetas, funditas, hasta la entrega de cajas con el logo de Presidencia… sin que eso dé un voto.
El «pobre» que tiene hambre hoy, la tendrá mañana, mientras el estado y la sociedad no le garantice su estabilidad.
Sin embargo, el «dao» es siempre una practica que prostituye la mente humana. El ser humano necesita pagar por lo que recibe, saber que es mediante su propio esfuerzo que recibe algo, la dádiva siempre, no casi, no, sino siempre, es perversa.
Esta expresión llega al clímax cuando un candidato balaguerista de otro partido en sus desfiles de campañas tiraba hasta salamis al pueblo.
El PLD, que llegó para «liberar» al pueblo, no solo no abolió esa horrenda practica sino que la asumió, a medida que su militancia y sus dirigentes mutaban a conservadores y por que no, al balaguerismo.
Hoy hasta sus máximos dirigentes enfatizan que hasta han creado «tradicionales entregas de cajas navideñas» sin entender… o quien sabe, entendiendo mejor que todos, que esta practica asumida va en contra del mismo respeto al ser humano y a la pobreza.
