La docencia en la escuela José de San Martín en Villa Verde, comunidad La Ciénaga, de Manoguayabo, continúa paralizada desde ayer, luego que los padres decidieran no enviar a sus hijos a clases debido a un foco de malaria en el lugar, como consecuencia de la acumulación de aguas negras en el patio del centro educativo.
La directora de la escuela, Gerda Hinojosa, informó que el jueves se celebrará una asamblea con los padres de los estudiantes, para definir el futuro de la docencia en el plantel, donde el agua dejada por la lluvia inundó el comedor, obligando a los estudiantes a comer en otro lugar.
Hinojosa y dirigentes comunitarios solicitaron ayer a las autoridades, declarar el centro en estado de emergencia, ya que el mismo constituye un riesgo para los estudiantes.
“Nos vamos a reunir para determinar qué se hará, porque estamos aquí junto a los profesores y el personal expuestos a enfermarnos de malaria”, dijo.
La escuela, inaugurada en el 2014, está ubicada al lado de una laguna que se formó por la acumulación de agua, donde funcionaba una cancha deportiva.
La laguna fue secada el pasado fin de semana por el Ministerio de Salud Pública, pero luego volvió a llenarse tras las lluvias.
Para este martes, a las 5:00 de la tarde, está prevista una reunión de dirigentes de la comunidad con el ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, informó la dirigente comunitaria, Celeste Bidó.
El centro alberga a 547 estudiantes.
