El balance de la operación es de 16 yihadistas muertos y otros 34 sospechosos arrestados
Después de tres días de ofensiva militar contra los grupos yihadistas asentados en la península del Sinaí, el Ejército egipcio aseguró el domingo a través de un comunicado haber abatido a 16 “terroristas” y haber detenido otros 34 sospechosos, además de haber destruido 66 escondites y confiscado varios vehículos y armamento. La Operación Sinaí 2018, tal como ha sido bautizada a pesar de incluir también acciones en el norte del delta del Nilo y en el Desierto Occidental, es una labor conjunta de las fuerzas aéreas y terrestres y tiene como objetivo descabezar Wilaya Sina, la filial egipcia del autodenominado Estado Islámico, la más potente y mortífera organización de la insurgencia en Egipto.
Desde el inicio de la ofensiva, el Ejército selló la entrada y la salida a la zona meridional del Sinaí, clausuró también el paso fronterizo de Rafá que comunica con la Franja de Gaza, y ordenó el cierre de todas las gasolineras hasta el fin de las operaciones. La vida de los habitantes de la península se ha visto también alterada por la suspensión de las clases en todos los niveles del sistema educativo, y cortes en las redes telefónica y de Internet.
Varios analistas ya habían anticipado una operación militar de gran calibre en el Sinaí después de que el presidente Abdelfatá al Sisi hubiera reaccionado a la masacre de la mezquita sufí de al-Rawda, el peor atentado terrorista de la historia del país en el que murieron más de 300 personas, advirtiendo que habría una respuesta brutal. La acción coincide con el inicio de la pre-campaña electoral de las presidenciales de finales de marzo. Después de que las autoridades aplicarán represalias legales contra todos los aspirantes que representaban un desafío para Al Sisi —dos de ellos aún están en prisión—, los comicios son vistos como una farsa, pero el mariscal necesita una buena participación para legitimar su reelección.
El ataque contra los grupos yihadistas se produce días después de que el diario The New York Times publicara una exclusiva en la que, citando a fuentes anónimas de varios países, aseguraba que Israel ha acometido un centenar de bombardeos secretos desde el 2015 contra posiciones yihadistas en la Península del Sinaí, base de operaciones de Wilaya Sina. Los bombardeos habrían contado con el beneplácito del Gobierno egipcio, que desde la llegada de Al Sisi ha estrechado sus relaciones con Israel, antiguo enemigo con el que libró cuatro guerras el siglo pasado y que continúa suscitando un sentimiento de inquina entre buena parte de la población egipcia. No obstante, el Ejército egipcio ha negado la veracidad de la información, mientras el Ejecutivo de Benyamin Netanyahu se ha negado a comentarla.