Se sabe que el dolor de perder amigos nos hace actuar a veces de forma equivocada, apresurada, cometer errores.
Se fue Johnny Ventura a la eternidad, anidando en cada corazón de para quien marcó una era no solo de música sino de alegría.
La vida de Johnny si bien fue, también, política, su fuerte seguro fue la música… y… aunque militó e incluso tuvo importantes cargos en política no se puede catalogar que en este tópico, marcara épocas, como lo hizo con la música.
Ventura termina su vida en el partido Fuerza del Pueblo siendo protagonista de una acción que se difundió en todos los medios, sin embargo, el resto de su vida política había transcurrido en otras organizaciones, por lo que no es una figura conocida en el bochismo que ideológicamente aportara peso a lo que necesita ser hoy, esa organización que, como todas, sufre de saberse cual es el camino a recorrer.
Hay acciones que se toman que rozan la falta de respeto, el infantilismo, el ridículo y lo políticamente incorrecto, y es claro que proponer y colocar el nombre de Johnny Ventura a la casa nacional del partido Fuerza del Pueblo es, evidentemente, un exceso de populismo completamente innecesario en forma y fondo, además, de extemporáneo, pareceria un acto de desesperación en una necesidad de brillar a como de lugar, un error, un gran error.
Johnny Ventura vivirá en todos los corazones de los dominicanos por su música eterna.