La ex-diputada Karen Ricardo anuncia que se presentará como pre-candidata a presidente de la república por el Partido de la Liberación Dominicana, el cual hace años no realiza primarias sin antes proceder a procesos traumáticos.
El PLD, ya desde el 2008 presentó campañas a destiempo y traumáticas, en el 2012 por poco pierde el poder para terminar cayendo en el 2020 luego de haber visto a unos de sus candidatos sumergirse en el 2016 en una campaña de descrédito a que a todas luces, salió de adentro.
Ricardo compitió por la Alcaldía de Santo Domingo Este en otro proceso muy cuestionado de encuestas sin que faltaran múltiples denuncias de fraude en la medición por la «filtración» de los lugares donde se encuestaría quedando el arrastre hacia otros proceso muy cuestionado por los torrentes de dinero gastados por los competidores en las primarias del 2020 a las que también se presentó, pero aun teniendo el apoyo de muchos, en todos los sentidos, perdió.
Karen se presenta en las también cuestionadas competencia interna por ser miembro del Comité Político y ahí si, al fin, logra entrar.
Su ausencia en Santo Domingo Este auguraba que no se presentaría (en teoría) a buscar la Alcaldía por una tercera vez y anuncia que en su carrera presidencial sale, desde el inicio, de la mano de Amarante Baret, miembro también del Comité Político, hoy, todos o casi todos cuestionados por sus fortunas y actuaciones como funcionarios públicos.
A diferencia de los demás candidatos Karen Ricardo con el anuncio de Amarante sale con el estigma de ser un «producto» controlado pues no es lo mismo salir y buscar adhesiones día a día, territorio por territorio, que salir impulsado por un poderoso aparato económico que, para colmos, de nada sirvió en la campaña del 2020 para el que hoy, la impulsa.
Este error, además, sesga a la candidata a un segmento de poder dentro de los varios que hay en el PLD y le impide así, crecer hacia afuera que es lo que amerita pues solo con las fuerzas del ex-ministro, no gana.
Es posible que otros pre-candidatos tambien tuveran desde el inicio el apoyo de miembros del Comité Político, sin embargo, lo callan, mientras que Karen comienza con estrategias que se verá al cado del tiempo si son correctas o erradas pero que a todas luces demuestran que la pre-candidata no será una figura con voz propia y menos, tomará desiciones por si sola sino que esta es la «candidatura de Amarante».