Un responsable kurdo-sirio subraya que no confían en EE.UU. por no recibir garantías por parte de Washington, por lo que siguen negociando con Damasco.
“Hubo acuerdos y cooperaciones entre nosotros y las fuerzas estadounidenses, pero esto no significa que los kurdos dependamos por completo de ellos”, dijo el jueves Aldar Jalil, uno de los líderes del llamado Movimiento por una Sociedad Democrática.
Jalil explicó que Washington no ha brindado garantía alguna para proteger a los kurdo-sirios de sus enemigos turcos, que quieren “eliminarlos”.
“Turquía quiere eliminarnos, en especial cuando una poderosa fuerza internacional, como lo es EE.UU., busca retirarse de nuestras áreas. Es lo que deseaba Ankara”, indicó.
Ante el repliegue de EE.UU. de Siria y una posible ofensiva turca contra las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo) en Manbij (norte de Siria), los kurdos seguirán negociando con el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, agregó Jalil.
“Tratamos de alcanzar una solución duradera con Damasco. Las negociaciones se encuentran en su etapa inicial, consideramos de suma importancia un pacto intersirio”, manifestó.
Las milicias kurdas controlan de facto una región autónoma de casi el 30 % del territorio sirio en el norte y este del país, y tienen el respaldo de la ilegal coalición contra EIIL que encabeza EE.UU.
Por otra parte, medios locales reportaron que el comandante de las YPG, Sipan Hemo, presentó a Moscú y Damasco un plan que prevé extender el control de las autoridades sirias sobre las zonas controladas por los kurdos si Damasco reconoce como legítimos los órganos de autogobiernos locales.
El acercamiento de los kurdos a Damasco se produce en momentos en que el mundo árabe está barajando retomar las relaciones con el Gobierno sirio y admitir el retorno del país levantino a la Liga Árabe (LA) después de 8 años de su expulsión del bloque.