Con nombres y apellidos, con banderas políticas y partidistas, la Ley de Extinción del Dominio es imprescindible para que un pais se proteja de la corrupción y otros males en el camino de parar la impunidad pero mientras el senador Antonio Taveras Guzman apela a recoger un millón de firmas para el impulso de la ley que desde ya cuenta con el apoyo de dos legisladores más, el resto permanece en mutis y sus partidos también y es hora, de que todos sepan quien se opone a que se recupere lo robado en la República Dominicana.
La transparencia es el signo de estos tiempos y lleva de amigos a las redes sociales y la prensa alternativa.
A esta ley se oponen legisladores nuevos, viejos, presidentes de partidos, todo un segmento del viejo status cuo que gobernó en medio de un clima aberrante de impunidad y que desembocó en la Marcha Verde y produjo la concientización del pueblo que terminó sacando una parte del mal pero aun el cancer está dentro de la sociedad incluso en algunos legisladores y funcionarios del gobierno de turno.
Es un mal social y cuando se habla de recuperar lo robado no es contra un segmento en específico pues al final unos ejecutaron y otros protegieron.
La Ley hará que el cambio necesario en la República Dominicana al final, llegue.