Miles de peces muertos llegaron arrastrados por la corriente a una playa de las costas del golfo de México en el estado de Texas (EE.UU.), reportaron las autoridades locales la semana pasada.
Los cuerpos en estado de putrefacción de los peces, del género Brevoortia — también conocidos como lacha—, se encontraron el viernes en Bryan Beach, cerca de la desembocadura del río Brazos, en el condado de Brazoria. Según los funcionarios, citados por New York Post, las muertes fueron causadas por las altas temperaturas del agua, que hacen que se reduzca la cantidad de oxígeno que esta contiene.
Las autoridades del parque de Quintana Beach, a pocos kilómetros de donde se hallaron los peces muertos, explicaron en sus redes sociales que cuando el agua supera los 21 grados centígrados «se vuelve difícil para los ‘Brevoortia’ obtener suficiente oxígeno para sobrevivir». «Las aguas poco profundas se calientan más rápido que las más profundas, por lo que, si un banco de lachas queda atrapado en las aguas poco profundas cuando estas comienzan a calentarse, los peces comenzarán a sufrir hipoxia», agregaron.
Asimismo, destacaron que las condiciones recientes de cielos nublados, que bloquean la fotosíntesis del fitoplancton microscópico o las macroalgas, así como de mares en calma, crearon una «tormenta perfecta para agotar el oxígeno en la costa».