El bochornoso título que circula en las redes de que el ministro de Educación habria dicho:
Fulcar: “Nadie obtendrá un título de bachiller en RD si no sabe el Himno Nacional completo
no es más que un exceso más, a los que ya el pueblo de República Domiicana se va acostumbrando pues su investidura no le permite funcionar como un dictador, por encima de lo que la Constitución plantea.
El conocimiento del Himno y los valores patrios no son obligatorios, ni para el conocimiento de nadie y menos, para un bachiller graduarse pues, aprenderlo obligatoriamente, no es parte escencial de lo que necesita un jóven para graduarse y avanzar en la vida.
Por desgracia, este tipo de excesos los comete una generación que creció en democracia pero que arrastra, indiscutiblemente, razgos visibles de comportamiento del tirano y peor, nada prueba de que aprenderse el himno habilite o no a alguien para ser exitoso en la vida o ser un vulgar delincuente.
Los excesos de los ministros han manchado el ámbito periodístico en el aun nuevo gobierno de Luis Abinader, desenfocando a estos errores la guia a lo que se hace positivo.
Todo esto ocurre cuando a las clases virtuales de las escuelas públicas en muchos grupos, asiste menos de un tercio de los alumnos lo que presagia la pérdida del curso escolar.