No hay un rincón en la red, donde el ministro Andrés Navarro coloque su propaganda electoral prematura que no surge la reclamación de los ciudadanos que «renuncie ya».
Ante la actitud indigna de no hacerlo durante meses, siendo poseedor del 4% del PIB y ante la sospecha del mal uso de esos recursos del estado para campañas proselitistas, frente, además, a la actitud de otros ministros como Amarante Baret y Dominiguez Brito que inmediatamente supieron que para dedicarse a la política, lo decentemente correcto era renunciar, al parecer no le ha quedado remedio a Navarro, quien no es político sino funcionario, de proceder a abandonar el cargo.
El hacer campaña desde una función del estado, a sabiendas de cuan clientelista es la población dominicana, es incorrecta.
Se anuncia ya tardía renuncia de Navarro y surge la misma pregunta que se le ha hecho a los demás candidatos… ¿de dónde sacan el dinero para la logística de campaña?
Luego de Navarro le toca a Alejandro Montás que, teniendo en rastras todo el presupuesto de la institución CAASD y su nómina, ha permitido que sus seguidores lo impulsen a una eventual candidatura para alcalde del Distrito Nacional.
Otro que debe ponerse en lista para no recibir críticas, que posee igualmente presupuestos millonarios bajo su sombrilla, es Domingo Contreras, quien también, al parecer, aun no es oficial, estaría lanzándose para Alcalde junto a Montás.
Las redes no perdonan, la población cada día es más rápido enterada de las actitudes indignas de los funcionarios devenidos en políticos.
Habrá que ver si el «impacto» de ser noticia es igual siendo funcionario, con presupuesto y nómina que repartir, a cuando estén en el medio del campo de batalla contando los «chelitos»