No es Macarrulla, No es Abinader, es saber Quién Manda.

¿Quién es Macarrulla y cuál era su rol en el Gobierno?. Macarrulla es el Poder, es el Ojo de la Oligarquía, el sector que no sabe donde queda Guachupita ni Cancino Adentro, los que viven dentro de los «domos» llamado «Polígono Central» en el Distrito y seguro en Santiago de los Caballeros les tengan otro nombre, casi siempre visten de blanco impecable y rara vez saben, qué es sudar.

Macarrulla no es Macarrulla, es un ente perteneciente a una clase social «supra» que va más allá del dinero, y que existe en las democracias representativas no solo en la República Dominicana sino a nivel mundial.

No es Macarrulla, No es Abinader, es saber Quién Manda.

En Estados Unidos hay «castas» que dominan el país y que van más allá del presidente de turno. Allí mandan las Farmacéuticas y el Complejo Militar Industrial, pues, ejemplo, a las hipermillonarias y globalizadas empresas de tecnología las sientan en el banquillo de las comisiones congresuales… ellas tienen dinero, tienen poder, pero no el poder que está por encima del Estado o del Gobierno.

Los sistemas del tipo Occidental se dividen en estratos sociales donde el ejercicio del poder que conocen los ciudadanos es perceptible a través de sus políticos, pero rara vez se sabe a que grupo «oligarca» obedece un gobernante específico aunque a veces ellos, incluso, son parte.

El destino del mundo occidental, en teoria, se deciden en conclaves recientemente conocidos como el Club Bilderberg que agrupa unas 130 personas «influyentes» del mundo que si bien es necesariamente una condición no ser pobre, el poder, el real, necesariamente no ha estado atado a este sino a «pertenecer».

Se casan entre ellos, se reúnen ellos, sus «chismes internos» pocos los conocen, son ellos… ellos son, los Dioses del Olimpo que cada sociedad posee en que la llamada Clase Política, aunque no se le puede catalogar necesariamente de «marioneta» si aparece como quien obedece, quien conoce que el poder es limitado y temporal pues, esa clase supra decide elecciones, procesos, gobiernos, políticas, todo, o casi todo… que no es lo mismo, pero el resultado, es igual.

En el caso Macarulla la llamada Justicia Independiente que no le ha quedado más remedio que colocar a un hijo de este en el expediente, ha puesto contra la pared al personaje que todos mencionan, pero posiblemente ni saben el tono de su voz, pocos sepan quien es, ni de donde vive, ni de donde salió, solo saben que es un «rico», un «super popi» al que las masas siempre «guiadas» apuntan como el «malvado» sin entender cuál es el papel de este en Palacio y por qué Luis Abinader simplemente no lo podía, como presidente, destituir o mandar a «enfermarse» y es simplemente que Luis Abinader pertenece a la misma clase social del Ministro y conoce perfectamente que ese «juego» tiene reglas que nadie conoce, no se conocerán, pero hay que jugarlas.

Macarulla era… o es, en el gobierno, tan poderoso como Luis Abinader y si se había decidido hacerlo visible, sabrán ellos con qué objetivo fue… a mala hora.

Las sociedades cambian, pero es claro que en el modelo de «democracia representativa occidental», que no es más que el sistema que se le implantó a todo el mundo del sur por los poderosos, los «Macarulla» mandan y seguirán mandando, aunque a su sustituto (si es que lo tienen porque de licencia se sigue gobernando) nadie lo conozca esta vez.

Las oligarquías sobreviven a todo, quien único las destruye es el cambio de modelo gracias a una revolución o cuando los temas «sucesorales» terminan con un apellido de «abolengo eterno» pero esto si, rara vez ocurre.

 

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