En las pasadas elecciones presidenciales no ganó el Partido Revolucionario Moderno (PRM) y hoy su presidente electo Luis Abinader Corona; sino que el pueblo hastiado de la dictadura morada votó para salir del Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Nadie está por encima de la voluntad de un pueblo decidido que después de dos décadas de mala administración pública, corrupción gubernamental e inseguridad ciudadana matamos la soberbia y prepotencia de un grupo de delincuentes con la estocada del voto.
Hoy las esperanzas de la nación florecen de la mano de un gobierno nuevo que cuenta con fichas repetidas en la fauna política nacional y este asume posesión de los destinos del país el próximo 16 de agosto. Nosotros no queremos ponderar el futuro y definir desde hoy que el gobierno de Abinader será igual que los gobiernos de Medina y Fernández; lo que sí les puedo aseguar a todos los perremeístas, es que el pueblo dominicano esta ahíto de la tortura impartida por los que se fueron y que estamos listos para barrer con la misma escoba a ustedes si entran con el hambre del robo al estado y al pueblo dominicano.
Una mala señal de Abinader es que en su discurso de victoria electoral en presencia de todos sus seguidores y compañeros del partido, se escuchó a gritos un reclamo que es compartido por todo el pueblo: “ los queremos presos, los queremos presos”, a lo cual el presidente electo, se hizo el zordo y mudo, una de las cualidades más despiadadas del ex presidente Danilo Medina. El pueblo quiere ver a los corruptos en las cárceles y jamás ver que se repita el famoso “ borrón y cuenta nueva”.
El miércoles 8 de julio está pactada una reunión entre Abinader y Medina, la cual pudiera ser la antesala para preparar el manto de la impunidad y de hacerse el loco de todos los delitos cometidos por este y los corruptos peledeistas. Aqui esta la primera oportunidad de ver de cerca si estamos aún esclavizados por las ambiciones personales y los políticos disolutos o si el país tendrá un presidente que sea un dedicado servidor público. En este tenor la destacada periodista Altagracia Salazar dejó claro que si en enero no hay un preso, el pueblo sale en protesta a las calles.
Las promesas de campañas del presidente electo Luis Abinader están recopiladas por todas las redes sociales y medios de comunicación, las cuales en su mayoría copió del dirigente político Ramfis D. Trujillo y aplaudimos esto porque lo bueno se copia. Ahora el presidente electo tiene en sus hombros la responsabilidad de hacer estas cumplir, como las elecciones libres para elegir al Procurador General de la República Dominicana. Esta es una promesa que asegurará la independencia del ministerio público y acomodar a todos los políticos delincuentes en la nueva cárcel de La Victoria que construyeron ellos mismos.
A nosotros nos gustaría ver la reducción de todos los salarios gubernamentales y la eliminación de los empleos sin trabajar en el gobierno o “botellas públicas”, ya que la crisis económica que vive el país primero por causa del PLD y segundo por el Coronavirus nos afecta a todos. La responsabilidad de la nueva administración pública es de revaluar todo el presupuesto nacional para sanear los gastos excesivos y disponer de los recursos económicos en áreas de la sociedad que más lo necesiten.
Nosotros queremos dejar muy claro que el pueblo está despierto y mira con una lupa en mano para detectar cualquier señal que indique que este nuevo gobierno es más de lo mismo. Los dominicanos no dejaremos que la soberbia que intoxica a los que beben de las mieles del poder y pongan en último lugar los intereses del país, nos gobiernen.
Ustedes los perremeístas están en el gobierno porque el pueblo con su voluntad salió del PLD, recuerden que tienen 100 días para demostrar que son servidores públicos y no servidores de sí mismos. Tenemos de antemano la misma medicina que acaba de curar la plaga morada el pasado 5 julio a disposición del presidente electo Luis Abinader Corona, sino cumple su papel de defensor de la soberanía nacional y de todos los dominicanos.
