Excelente selección hicieron los diputados comandados por Antonio taveras y Faride Raful que, resistiendo los embates y presiones se dice, incluso, de presidencia, lograron seleccionar a un buen Defensor del Pueblo que hoy está bien cumpliendo su rol.
Sin embargo, en entrevista al programa Sol de la Mañana de la estación ZOL en dos ocaciones hablo en primera persona donde debió decir «nosotros».
Al insistir se notó en sus palabras un razgo muy peligroso de «creerse» demasiado y hay que recordar que él no es la Institución sino que es parte de ella, con presupuesto incluido y que exito en su trabajo es gracias a otros hombres y mujeres que le acompañan que para colmos, gracias a los impuestos del pueblo, cobran.
Hablar en primera persona es una falta de delicadeza y de humildad que hace temer, quien sabe, que mañana el cargo podria «subir» a su cabeza y desgarrar los logros en un «yoismo» del ego desmedido.
Los funcionarios son parte del sistema y este, para colmos, es elegido por quienes además, fueron elegidos.
