Puerto Plata. Un grupo de esposas y otros familiares de los 176 pescadores que guardan prisión en Nassau, Las Bahamas, irrumpieron ayer en la Gobernación para denunciar las calamidades que estos pasan desde hace dos meses cuando fueron apresados por violación de aguas territoriales.
El grupo de damas llegó hasta la oficina del gobernador Iván Rivera Bastardo, donde fueron recibidas por la esposa de este, Maritza Núñez, quien se comunicó con Cancillería para determinar el curso de las gestiones que se realizan para su liberación.
Los familiares exigen que una comisión del Gobierno viaje a Nassau para que compruebe en qué condiciones están sus familiares presos, ya que tienen informaciones verídicas que establecen que están enfermos y pasando penurias en las cárceles inglesas.
Los pescadores, capitanes y los miembros de la tripulación que fueron apresados a bordo de tres embarcaciones cuando supuestamente hacían pesca furtiva, fueron condenados a 6 y 8 meses de prisión y al pago de 42,000 dólares y 52,000 dólares.
En una nota de voz vía Whatsapp que uno de los pescadores remitió ayer domingo a su esposa se escucha cuando este explica claramente que “nos estamos muriendo dentro de una angosta cárcel donde estamos hacinados como sardinas enlatadas”.