Novecientas diecinueve personas personas fueron obligadas ayer por la Policía a ponerse la mascarilla y 540 fueron arrestadas por violar el toque de queda.
Mientras que para tratar de frenar la propagación del coronavirus, el Ministerio de Salud Pública decidió ayer intervenir de nuevo sectores del Distrito Nacional.
La institución del orden inició ayer varios operativos en el Distrito Nacional y las provincias para tratar de hacer cumplir las disposiciones del Ejecutivo consignadas dentro del estado de emergencia declarado por el Congreso Nacional.
Durante las pesquisas, que se llevaron a cabo en todo el territorio nacional, unas 919 personas fueron obligadas a ponerse las mascarilla, ya que muchos la utilizan sin que les cubra la boca o la nariz.
En tanto que 540 personas que se encontraban en la calle pasadas las 8:00 de la noche, sin jutificación, fueron arrestadas por violar el toque de queda.
Falta de respeto
Pese a la intervención anunciada por las autoridades sanitarias en el Gran Santo Domingo, las personas siguen haciendo caso omiso a utilizar de manera correcta la mascarilla. En los barrios es donde más se viola la disposición, ya que muchos jóvenes se sienten inmunes al coronavirus.
Hoy se puso observar a mercaderes, tricicleros y guagueros que utilizan el objeto preventivo en la barbilla, sin que les cubriera boca y nariz que es por donde principalmente entra el coronavirus.
Hasta algunos agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito (Digeset) usaban la mascarilla sin que les tape la nariz, con lo que dan el mal ejemplo al ciudadano.
Esta mañana en un recorrido por los sectores de la parte alta del Distrito Nacional no se vio la presencia de las autoridades tomando medidas para obligar a las personas que se protejan con la mascarilla.
El Ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cáldenas, dijo hoy que para frenar la propagación del coronavirus en el Gran Santo Domingo, se hace necesaria su rápida intervención, como sucedió en Puerto Plata, Santiago y La Vega, donde se han reducido los casos.
Explicó que las direcciones provinciales continúan las intervenciones en la misma medida en que se activan las actividades económicas y sociales.
“Eso significa que este personal está sometido a un estrés extraordinario, porque se trabaja de lunes a domingo. Ni el Ministerio ni el Servicio Nacional de Salud, ni las Fuerzas Armadas ni la Policía han descansado porque trabajan hasta la noche y la madrugada dando seguridad de que el plan se están cumpliendo”, añadió Cáldenas.
Explicó que el 34% de la población dominicana está en el Gran Santo Domingo, por lo que entiende que hay que reforzar las medidas para controlar la pandemia.
El funcionario urgió la necesidad de controlar el tráfico de personas del Gran Santo Domingo a las provincias para impedir la expansión.
“Ese tráfico hacia los pueblos tiene necesariamente que implicar que los ciudadanos que están haciendo esa movilidad para visitar familiares sepan que allí hay una población vulnerable que es la que tenemos que cuidar”, concluyó.
Intervención
Los sectores ayer en la capital fueron La Agustina y Cristo Rey, como parte de los operativos de prevención iniciados por el Ministerio de Salud para combatir la propagación del COVID-19.