En un atrevimiento fuera de orden, el aun no gobierno Partido Revolucionario Moderno instaba al gobierno a participar en el golpe de estado contra Venezuela reconocimiento al autoproclamado en una plaza pública, Juan Guaido.
Guaido, presidente de la Asamblea en desacato, de Venezuela, había recibido el apoyo de varios países que, complotados, desconocieron las elecciones de Venezuela y sus resultados, para seguir el guión de los Estados Unidos para derrotar al chavismo.
Pero el tiempo paso, Guaido no pudo «coronarse», Maduro resistió el golpe y hoy, allá, en Venezuela, se entienden el Gobierno Legitimo y los golpistas de la oposición.
El PRM queda señalado de cara a un eventual gobierno en la República Dominicana como un enemigo.
Ya en el período de gobierno del 2000-2004, se había participado abiertamente en el plan de derrocar del gobierno a Chavez que produjo no solo que Venezuela «cerrara el grifo» y se acelerara una crisis sin sentido y sin control, sino que cerca de ser gobierno el mismo Hipólito Mejia mandaba a un mensajero personal en 2012 a «conversar» con los venezolanos… a «enfriarse» luego de el error de su gobierno.
Maduro sigue en pie, el PRM compite y quiere ser gobierno pero desde ya, tropezó en su política exterior sin que ni estuviera justificado ni hiciera falta… esa «bronca» aun no es suya.
