Mucho se ha hablando del mal uso de los recursos del estado para despropósitos, populismos, clientelismos, y estos se manifiestan de diferente forma.
El orden debe ser: «La institución delante, el responsable, detrás»… pues es el dinero del pueblo quien produce todo lo que hagan y es injusto, antietico, abusivo, que estos hagan un mal uso de los recursos del estado.
Varias veces se ha criticado el mal uso de los logos institucionales para política, su gasolina, su prensa, y aunque algunas prácticas se enmascaran otras hacen, como el título que acompaña esta nota a toda página, los empeños de vender electoralmente de forma prematura a alguien, equivocando el rol de las partidas de publicidad y de la prensa institucional que también la paga.
Por desgracia, estos malos ejemplos lo hcen algunos funcionariso de este gobierno, emulando lo que hacian los que les antecedieron en el poder, demoestrando que la clase política salvo escasos ejemplos, es diferente.