Los del Comité Político del PLD luchan por mantener supremacia mientras forzan a que los que quedan molestos agarren sus maletas y dejar espacio para pequeños, seguir mandando los destinos del derrotado morado conclomerado.
Los que se marcharon no se detienen a tomar café sino que entran a la casa verde con los sueños de ser los mismos como Copy & Paste, arrastrando muchos sus nombres desgastados por haber sido parte, todos, de la debacle morada, como trasladar un enfermo de un carro viejo a uno nuevo sin curarle.
Cada día se visualiza que el PLD no tendrá renovación si se mantienen los mismos «dirigentes» que hace tiempo solo se esfuerzan en mantener en los medios sus nombres pero hace rato dejaron de interactuar con los que sufren los destinos del partido que padecen hoy el perder el poder, los trabajos, sus hipotecas, sus carros entregados… mientras, ojos se viran a la Fuerza del Pueblo con esperanza pero mucho recelo… está aun fresca la imagen de un PRM copiado y pegado desde el PRD, comenzando por la entrada hasta el postre, platos malos y buenos incluidos.
Se sabe que no habrá revolución pero hay quien tiene la esperanza que de algunas de esas «renovaciones» salga algo bueno para la ya dolida e incrédula República Dominicana
