La «foto de campaña» es uno de los elementos más importantes en el lanzamiento de una candidatura, por lo que debe pasar filtros varios para no excederse.
No hay foto que hoy no sea retocada pero el abuso puede tener efectos contrarios.
No hay forma de, mediante una foto, vender un candidato que no señale en lo personal quien no es, por lo que aun cuando la foto debe quedar casi perfecta, debe acercarse bastante a la figura real para que el contraste no mate la ilusión.
En la República Dominicana ha habido mal usos de las herramientas de retoque de imágenes que lo curioso es que pasaran por el filtro de los expertos en tener que vender esa «puesta en escena» y claro, los asesores.
Casos emblemáticos como Macoris, Leonel Fernandez, Milagros Ortiz Bosch y Miguel Vargas son recordados por fotod de campañas que fueron presa de burlas y quedaron en la mente del ciudadano como tal, como ahora ocurre con la de la aspirante a la presidnecia por el PLD, Margarita Cedeño donde parece es una «máscara» que tiene, casi tratando de lucir que es como una teen.
Si bien es cierto que es necesario buscar empatía con los jóvenes, es falso que lo puedas lograr modificando al extremo una imagen.